No es tan fácil Uno quiere dejar a su pareja y no sabe cómo hacerlo. En este caso se trata de Quique que quiere dejar a Andrea. ¿Cómo? No es tan fácil.
Sólo tres personajes hablando sobre el desamor, que es como hablar de nada. Es un recorrido por la imaginación del protagonista, donde el espectador (o la espectadora) se identifica absolutamente.
Es una comedia íntima sobre la pareja pero, por encima de todo, un ejercicio de estilo sobre la obsesión: la del protagonista, que busca las mil y una maneras de dar lo que él cree que es una mala noticia, y la del autor, que se entestó en darle un sentido teatral a la reiteración sobre el mismo tema intentando no salirse de unas premisas realistas.