Con lo esencial y, sobre todo, con dos actores y dos actrices excelentes, viajamos por los tres actos disfrutando de «juego teatral» constante. Porque el teatro es, en esencia eso…juego y cuando lo hay en grandes cantidades, se vuelve una delicia para el público y todos disfrutamos de errores, tropiezos y disparates. Una maravilla de comedia